February 08, 2009

Palabras de segunda mano

Hay palabras que usé o escuché durante toda mi infancia y que hasta le fecha no sé cómo se escriben o de dónde vienen o qué significan. Muchas de ellas las perdí con los años, no sé si porque son del dominio exclusivo de los niños de primaria, o porque se fueron a la dimensión desconocida donde viven las cosas de los ochentas que no regresaron con el boom comercial. Algunas otras, estoy segura de que se las tomé prestadas a mis hermanos, así que para cuando yo las usaba ya iban camino al ático, junto con las plataformas y la peluca de Ringo Star que usaba mi mamá en 1974. Y para algunas más, el olvido fue tan definitivo, que a pesar de los esfuerzos no lograron colarse en esta lista.

Una de ellas es las trais. Afortunadamente nunca tuve que escribirlo, pero el solo hecho de pronunciar esa palabra me causaba incomodidad. Como tenía obvia relación con "traer", siempre pensé que debería decirse "las traes". Pero uno no por escuincle es menos hipersensible a la hipercorrección y "las traes" suena horrible. Así que ni modo, "las trais". Por cierto, ¿qué es eso que uno trae cuando "las trai"? Si alguien sabe por favor dígamelo.

Con las trais viene pido, y la señal de amor y paz que le acompaña. El pido es irrevocable, y es casi casi un derecho humano. Cuando le da a uno el ataque de asma, o perdió los mangos con chile en la corretiza, o por alguna otra razón ya no puede seguir corriendo, no hace falta más que enseñar los dedos índice y medio, hacer la señal de "peace and love" y decir "pido". Y tienen que ser las dos cosas al mismo tiempo. Nadie decía "pido" sin hacer la señal. Ni vale de nada hacer la señal sin decir "pido". Obvio, "pido" era la forma corta de "pido paz". Pero nadie decía tampoco "pido paz". Sólo decía "pido" y la paz le era automáticamente concedida.

A la de tres se quemaba algo que se llamaba bas. Nunca más he vuelto a escuchar la palabra "bas". Cuando era chica, pensaba que "bas" era en realidad "base". Y en cierto modo lo sigo creyendo, pero la bas es diferente, es exclusiva de las escondidillas. Nadie dice, por ejemplo "Los bomberos estaban en su bas cuando se incendió el mercado", o "Ese pesero está haciendo bas". Que por cierto, sólo nosotros llamamos "escondidillas" a ese juego, porque hasta donde sé, otros las llaman "escondidas" o sólo "escondite". Como este blog presume de tener una audiencia de dialectos muy diversos, aquí aprovecho para pedirle a los hablantes de otros españoles que me digan cómo se llama en su país el juego ese en el que te escondes y te buscan, y sobre todo, si también le llaman "bas" a la bas.

Pero no todo era jugar. También había que hacer cosas serias, sobre todo en la secundaria, donde aprendí el verbo encachar. Al principio me sonaba horrible, pero después entendí que es un verbo insustituible y que comprime en tres sílabas un significado que, si se quisiera expresar de otra manera, tendría que decirse mediante una frase larguísima, como "acto de hablarle bien a un amigo acerca de otra persona, con fines de celestinaje". El que encacha, pues, no es más que un alcahuete que le chismea al compañero: "Le gustas a fulanita". En la secundaria, el papel del encachador es crucial, pues le evita a uno la vergüenza de lanzarse con el riesgo de un posible rechazo. Gracias a la labor del encachador, uno va a la segura, o si es niña, simplemente espera. Cuando dejé de reistirme a usar esa palabra conseguí mi primer novio. Recuerdo que todo empezó como una apuesta y los términos del acuerdo eran: "Si pierdo te encacho a Horacio, pero si gano me encachas a tu hermano". A la semana mi amiga ya era mi cuñada y se acabó la amistad.

En mi casa usábamos algunas palabras que nunca supe si venían de Michoacán o de la década pasada, porque en la escuela nadie me entendía cuando las usaba. Las usaban mis hermanos, y yo con ellos. Una de ellas era école, o en su forma larga école cua. Nunca supe cómo se escribía eso, y seguramente era una frase grubi setentera que empezó a usar alguno que oía música en italiano. Luego estaba otra más misteriosa: chasgan. "Chasgan" es una interjección y se se usa cuando te chasganeas algo, que es cuando le arrebatas algo a alguien, te lo agandallas, agencias, apropias, o como se le llame en español estándar. Por ejemplo: "¡Chasgan lápiz!" y te quedas con el lápiz que al grito de "chasgan" recogiste velozmente de la mesa. A veces el objeto de chasganeada se puede dejar impronunciado y se infiere del contexto, por ser la cosa que uno se apropia ante la mirada sorprendida del (antiguo) dueño.

Le estaba contando a Ana que es muy común, como sabemos, que se hagan nuevas palabras compuestos juntando un verbo con su objeto: por ejemplo: matasanos, lamebotas, limpiaalfombras, pisapapeles, muerdealmohadas y demás. Unos amigos usaban un verbo de su propia fabricación: "patitachitear", que es la acción de patear tachitos por la calle ("tachitos": botecitos). También usaban "cantuchiflear", de significado transparente. Pero mi palabra compuesta favorita de todos los tiempos no la inventó alguien que conozca, y ya estaba allí cuando yo llegúe a la primaria: perroconfundir: confundir a alguien con alguien desagradable como un perro. Así decían en mi primaria. Por ejemplo: -Cuando te vi llegar, pensé que eras Sutanita. -¿Sutanita? ¡No me perroconfundas! Perroconfundir no es confundir a un perro, sino a una persona, y tomarla por alguien que no es y que además no le cae bien. Desde que salí de la secundaria y hasta hoy, no volví a escuchar esa palabra.

Practi-tip ociolingüístico de hoy:

Desempolve sus palabras de la secundaria y úselas todo el día durante una semana en el trabajo. Por ejemplo, cuando vaya a tomar un descanso, anúncielo haciendo la paz y diciendo "pido". O presione a la gente que usa durante horas la fotocopiadora con una amenaza como "a la de tres se quema la bas". Revivirá las memorias más recónditas de sus interlocutores.

A continuación se abre el mercado de pulgas. Puede usar los cuadros de comentarios como puestito para compartir sus palabras pasadas de moda, vintage, retro, valiosas o chafísimas a discreción.

17 comments:

Anonymous said...

Violeta, desde aquí desde los 80 (donde me llevaron sus palabras) le comparto mis experiencias idiomáticas (sí, ya sé que LE comparto está mal, pero suena de simpático…):

1.Acá en estos lares (no me atrevería a ir más allá de la provincia de Buenos Aires) eso de “las tráis” suena conocido. Pero si me memoria no me engaña, acá decimos que “alguien se las trae”. Tendrá algo que ver con eso de “traerse algo entre manos”?

2.Ay, el “pido”, qué nostalgia! No recuerdo jamás haberlo reforzado con la señal de amor y paz. Tampoco recuerdo que tuviera para nosotros ese significado (el de amor y paz, digo). Lo que recuerdo, en realidad, es sólo su utilización en el juego de la mancha (potestad de escuelas primarias), donde se lo esgrimía con la misma finalidad que usted cuenta: el pedido de tregua. Irrumpe en mi memoria el “pido gancho” (forma corta de “pido gancho, el que me toca es un chancho”). Los años son muchos, ya no me acuerdo si correspondía al mismo juego.

3.Acá me asalta la confusión. Hasta la “escondida” (así, en singular) llego. Pero, había “bases” en ese juego? No se trataba sólo de esconderse y tratar de tocar el lugar donde el que buscaba había contado hasta x? Ese lugar era la “base”? Uf, lo que es la vejez…qué era lo que había que decir cuando se tocaba ese lugar? Qué era lo que el último tenía que decir para salvar a “todos los compañeros”? (“Libertad para todos los compañeros encarcelados” definitivamente me suena muy moderno…).

4.Esto de su “bas” me recuerda a la cafúa, que era el lugar de protección donde el que te corría no te podía tocar. Creo que era en el juego de la mancha. Supongo que ningún otro país latinoamericano compartirá este bello tono lunfardístico (de todos modos, no deja de ser interesante que la guarida sea nombrada con el lunfardo de “cárcel”).

5.Sí, sí, el viejo “eccole qua”. Hélo aquí. Eso es del tiempo en todavía no éramos finos y elegantes ni nos valíamos del francés (y bueno, qué podía esperarse de gente que usaba tiradores y jeans nevados).

6.Otra vez ay! Su relato trae a mi memoria la eterna discriminación que todavía sufro por venir de una ciudad que no es la capital. Cada vez que digo “lejía” (por lavandina), “carasucias” (por tortitas negras, una clase de factura) o “chuflines” (por gomitas para el pelo), el interlocutor enmudece de incomprensión. A ver, tengo yo la culpa de que su vocabulario sea tan limitado?

Violeta Vázquez-Rojas said...

Ah.. tienes razón Martita, estoy confundida. A lo mejor "la bas", o sea "la cafúa", es en efecto de la mancha, o de las tráis, que es lo mismo. Pero en las escondidillas también había una. El que llegaba primero a la bas, gritaba "uno dos tres por mi y por todos mis compañeros!". Ese es el grito que años más tarde muchos tuvieron que modificar por el de "presos políticos, libertad!", de ahi que ya no te acuerdes del cantito.

Anonymous said...

jajajajajajaajajja esta increible! ya no me acordaba del *pido* jajajajjaja hmmm aunque yo tampoco recuerdo la señal de paz... recuerdo bien el *safo* ja, lo sigo usando... vino a mi memoria *gancho* jajajajaj lo recuerdas? ponias los dos dedos indices en forma de gancho y los agarrabas entre si jalandolos para afuera, todo esto mientras veias a los ojos a cualquier perro que estuviera a punto de cagar, jajajajaja la leyenda decia que ya nunca mas podria hacerlo... jajajajajaj me acuerdo que una vez lo intente con mi madre y la sorprendi en el baño mirandola directamente a los ojos y gritando... GAAAAANCHOOOOO!!! jajajajajaj ese dia descubri que, al menos con las personas, no funcionaba... jajajajajaj palabra compuesta... lameculos, mi favorita junto a perroconfundir...
hmmm hay variaaas cosas de las que hablas que nunca escuche... encachar! llegue a hacerlo pero creo que no le deciamos de ninguna manera en especial
jajajaj que divertido post y sabias que hoy me despertaron mi sobrino y Ju porque jugaban escondidillas y vinieron a esconderse a mi cuarto? jijiji con Ju me doy cuenta de que todas esas cosas siguen estando ahi... los mismos juegos, con las mismas palabras... es una cadenita que pasa de generacion en generacion y de la que fuimos parte... jijiji esta padre

puj

christian h said...

No sabía que Las trais se llamara La mancha en Argentina. Pero me suena a que entonces lo que uno trae es la mancha. Como si uno trajera la tintura invisible en la mano, y por eso hay que tocar físicamente al otro.
Yo pensabe en mi ingenuidad que perroconfundirse era una invención de Cocoy la hermana de Eri. Existe un cassette de 1984 en el que se documenta su uso. Evidentemente, ella solo usaba una palabra que estaba en uso entre los de su edad o en los ochenta, o en los ochenta entre los de su edad (4 años).
A mí mi abuelita me decia que me iba a dar un aire si hacia muecas, y que me iba a quedar asi. Entre desconfiado y aterrado quitaba la mueca (yo hacía muecas usualmente en el contexto de no quereme comer la carne ni los chicharos del arroz).
Cuando me ponía una camisa o un suéter que me quedaba grande de las mangas, tanto que se perdian mis manos me decía que parecía Abelino Pilongano. No sé quién era el personaje, ni sé por qué insistía yo en usar ropa que me quedara larga de mangas, lo que exasperaba a la abuela. Sé que usaba ropa larga, y que era de pocas luces, el tal Abelino Pilongano.
Un día dije en la primaria que a alguien le iba a dar el telele si no se salía con la suya, y otro dijo que esa era palabra de abuelita. Yo me sentí orgulloso y conocedor, como si me hubiera dicho: "Ah, Telele, sólo los conocedores...". Ya no la volví a usar. Mucho.

Anonymous said...

Ahorita no me acuerdo de otras, pero quisiera tener la primicia de recordar a los lectores de este blog "La carne de burro no es transparente" que es lo que uno soltaba con sorna cuando alguien obstruia la vision (que por los anyos en que uno la usaba, generalmente era la del pizarron)
Su practitip ociolinguistico llevado a la pantalla: PidoY (sobretodo para aquellos que gustan de chatear o textear)
Padrisimo tu blog

Anonymous said...

Mi mamá que escuchó atentamente mi lectura de este maravilloso post acaba de recordar algo que espero les suene conocido: "Está paike" no sé si se usaba también en el centro del pais pero acá en occidente era harto usado; muchos besos Viol, te extraño muchísimo.
Daniela

Chacha said...

¡Ah! Cuantos recuerdos, cuanta nostalgia... cuanta vejez (jajajaja).

Por mis rumbos, también se le conocía a "las trais" como "la roña", con lo que la teoría de christian acerca de la mancha cobraría más sentido.

Y hablando de juegos, me acordé de uno llamado "gorrión gorrión". Era toda una experiencia surrealista con tintes 'shakespearianos'. Ya haré un post acerca de todo el ritual.

Saludos.

P.D. Sí, me pierdo de vez en cuando, pero trataremos de hacer un espacio en la agenda para venir más seguido

Violeta Vázquez-Rojas said...

Puj,
El safo es insustituible. "SAFO!" y viene muy bien en un ambiente laboral. Tocas un tema muy interesante: ¿quién carajos le enseña a los niños lo que los niños saben? Las reglas del juego tal vez las enseña un adulto, ¿pero la jerga? Lo chistoso es que cada generación de niños usa un eslang muy parecido, que los adultos ya olvidaron. ¿Cómo se transmiten esas palabras? No lo sé, pero sospecho que Chabelo tiene un papel muy importante en esto...

Violeta Vázquez-Rojas said...

Querido Abelino Pilongano:
Sólo la abuelita de Christian te conoce. A mí me hablaron mucho del aire, pero del señor de las mangas largas nunca.
Me recuerdas otras palabras del necesér de mi abuela: "necesér", "chifonier" y mi favorita: "bagatela".

Violeta Vázquez-Rojas said...

Pido Y!
Yo decía "la carne de burro no es transparente" cuando mi hermana me tapaba la televisión. El pizarrón me daba lo mismo. Me recuerda el "estoy hablando con el dueño del circo, no con los animales" y otros dichos del estilo. Siempre contra los hermanos. Los que no tuvieron hermanos, se fueron a desquitar al kinder.

Dani,
Las mamás se merecen un diccionario aparte. "Paike" todavía se usa, y mucho. En mi léxico la que lo reintrodujo fue Lucero, quizás directamente del vocabulario de Mamalena. Mi mamá no dice "paike", dice "suave". Ese sí no me he atrevido a usarlo. Hay cosas que sí y cosas que no. "Suave" nomás no.
Te extraño a tí también.

Chacha,
Saludos de nuevo! No tengo ni idea de es del gorrión gorrión. Yo de juegos sólo me remito a los clásicos, porque tampoco era gran experta. Por ejemplo nunca jugué burro castigado, ni sé cómo se juega. Decían por allí que las cebollitas eran toda una incursión en el incipiente mundo de la sexualidad, pero tampoco jugué eso. Si, por favor escribe un post y explícanos!!

Anonymous said...

Claro, perroconfundir! En mi primaria existía la versión larga que era: 'No me perrococodrilogallogallina confundas!'
Mi hermano y yo teníamos la de '¿fash-fosh?' lo que quería decir '¿me das de tu helado (o lo que fuera que estuviera comiendo) y yo te doy del mío?
Saludos, un gusto volver a leerte!

Anonymous said...

Ay Violeta cómo me has hecho reír, pero los comentarios no se quedan atrás! Yo no conocía la de encachar, pero como otros de tus lectores, yo vivía con mi abuelita la que hasta la fecha me habla con su acento oaxaqueño y sus palabras que yo pensaba eran del dominio público defeño:
"pichancha" - coladera del caño
"coyuche" - maltratado
"muchito (a)" - niño niña
"soplamocos" - una buena bofetada
"yope" - indio
pero la frase verbal que me encanta es "y tu amiga? Sigue a escribir su blog?"
Y así... te mando un abrazo!

Anonymous said...

No, ps en mi primaria seríamos más nacos, pero nosotros decíamos "pidos". Ah, y en mi pueblo decíamos, además de "paike", "pa su mecha" y "pa su máquina"...

Anonymous said...

Hola Vio, qué tal cuando aparecía el dilema sobre la verdaddera identidad u origen de algo ¿es de a devis o de a mentis?

Anonymous said...

Ejemplo de intercambiable:te pego de a devis te doy un beso de a mentis, te pego de a mentis te doy un beso de a devis un mundo de diferencia.

Larisa Escobedo said...

y tu eres la que dice que yo soy guevona! escriba!

Violeta Vázquez-Rojas said...

Me encanta lo que es de a mentis. Muy usado, tienes razón: pastel de a mentis, sopita de a mentis... ¿Porqué insistíamos tanto en terminar las palabras con "s"? "Primeras", "Segundas", "Terceras" Primeras qué? Por qué en plural, y en femenino. Raro. Los niños son raros. Qué bueno que ahora somos adultos de a devis. :{